
Nota del editor: Este ensayo en primera persona de Desiree Williams, madre de Georgia, ha sido adaptado de la página web de American Federation for Children's Voices for Choice.

Me llamo Desiree Williams y soy la madre de un chico de 16 años llamado Kyle.
Mi hijo asiste a la Central Christian School de Sharpsburg, Georgia, desde sexto curso. Conocí la escuela a través de una amiga cuyo hijo asistía. Me habló de Central Christian porque sabía que yo buscaba un entorno más pequeño para mi hijo porque sabía que así aprendería mejor.
Creo que es muy importante que los padres puedan elegir el centro escolar de sus hijos, porque todos los niños aprenden de forma diferente. Tienen necesidades diferentes, por lo que la capacidad de los padres para opinar sobre su entorno de enseñanza es crucial para cómo y qué aprenden.
En Central Christian School, mi hijo recibe la atención que necesita mientras sigue el currículo básico de clases para su nivel de grado, a la vez que tiene la oportunidad de participar en un programa de preparación para la universidad. Cada estudiante en Central Christian tiene la oportunidad de tomar clases avanzadas para prepararse para el aprendizaje superior después de la escuela secundaria.
Central Christian también ofrece un entorno estructurado que enseña la lectura básica de la Biblia y la palabra de Dios, lo que me parece importante, ya que significa que los estudiantes son menos propensos a evitar situaciones problemáticas y tomar mejores decisiones en la vida.
Hay muchas cosas que me encantan de Central Christian School. Un aspecto que aprecio particularmente es el personal. El director, el vicedirector y todos los profesores son increíbles. Puedo decir que esto no es sólo un trabajo para ellos, es su vocación. Son personas muy apasionadas y temerosas de Dios que aman a cada niño. Hacen todo lo posible para asegurarse de que cada niño reciba toda la ayuda que necesita para tener éxito.
Central Christian tiene una política de puertas abiertas que anima a los padres a acercarse en cualquier momento para hablar de nuestros hijos. El personal es muy rápido para responder a cualquier y todas las preguntas y abordar cualquier preocupación que podamos tener. Y el voluntariado es recomendado, alentado y bienvenido en Central Christian.
Cuando dejo a mi hijo en Central Christian, me siento cómoda sabiendo que está en un buen ambiente. Saber que su hijo está aprendiendo y prosperando, y superando las expectativas, es la mejor sensación del mundo para un padre. Es algo que todo padre merece, independientemente de su origen y nivel de ingresos.
Como madre soltera, he soportado muchas luchas, física y financieramente, para mantener a mi hijo asistiendo a Central Christian. Los administradores de la escuela han sido de gran ayuda, y estaré eternamente agradecida por su apoyo.